El masaje antiestrés completo
Lo primero que debemos saber sobre el masaje antiestrés completo es que consiste en llevar el cuerpo y la mente a un estado de calma y desconexión profunda.
Con este masaje se crea en el paciente un espacio que induce a fluir.
Así mismo, en la sesión se incentivan los sentidos auditivos con música ambiental.
Para luego con movimientos lentos, suaves y harmoniosos alcanzaremos la sensación de tranquilidad y paz que necesitas. Esa tranquilidad y paz que tanto cuesta conseguir hoy en día.
Con este masaje vamos a mimar el alma. Mediante manipulaciones sincronizadas, con una pauta lenta y sutil.
A su vez conseguiremos una estimulación sensorial sin dolor. Y entre otras cosas, aumentar la producción de endorfinas, que se encargan de hacernos sentir más felices.
El masaje antiestrés nos permite encontrar ese momento para dar paz a nuestro ser, desestrezarnos y poder conectar nuevamente con nuestro propio bienestar.
En nuestra sesión de masaje antiestrés completo antiestrés, te puedes quedar dormido/a 20 min más después de la sesión de 80 min (que normalmente realizamos).
¿Qué es el estrés?
El estrés es el estado de cansancio mental provocado por la exigencia de un rendimiento muy superior al normal; suele provocar diversos trastornos físicos y mentales.
Según la biología; el estrés es el conjunto de alteraciones que se producen en el organismo como respuesta física ante determinados estímulos repetidos, como por ejemplo el frío, el miedo, la alegría, etc.
Para nosotros, el estrés es el mal del milenio. El mal silencioso que acaba con tu vida y que nadie le da importancia.
Debido al estilo de vida exigente que hoy en día vivimos, las responsabilidades, problemas y asuntos a los que debemos hacer frente, tanto física como mentalmente sufrimos una respuesta automática natural del cuerpo.
Ya sea por sobrecarga excesiva y mantenida en el tiempo, que puede derivar en dolores de espalda, contracciones musculares, dolor de cabeza o ansiedad entre otros.
Esto no es más que un aviso de que debemos bajar el nivel de autoexigencia e intentar calmar la mente.
El masaje antiestrés, a través de diferentes técnicas aplicadas en base a la necesidad de la persona, busca favorecer el equilibrio.
Al relajar la mente, liberar tensión muscular y activar la libre circulación de energía por todo el cuerpo, logramos progresivamente esa sensación de descanso y recuperación general.
Realizarnos constantemente masajes o tener un sentido de conocimiento acerca de ello, es algo que no deberíamos descuidar porque es un cuidado para nuestro cuerpo a pesar de las exigencias de la vida, de nuestro tiempo, etc.
Encontrar ese momento para nosotros y nuestro cuidado nos aportará un estado de ánimo más calmado y mayor sensación de ligereza y plenitud.
El objetivo principal de un masaje antiestrés
El objetivo principal de un masaje antiestrés es aliviar la tensión acumulada en el cuerpo y la mente, promoviendo una profunda relajación. Este tipo de masaje está diseñado para:
- Reducir el estrés físico y mental: A través de movimientos suaves y firmes, se libera la tensión muscular y se calma el sistema nervioso.
- Mejorar la circulación: El masaje ayuda a que la sangre fluya mejor, oxigenando los tejidos y eliminando toxinas, lo que contribuye a un mejor estado de salud general.
- Equilibrar el cuerpo y la mente: Al disminuir los niveles de cortisol (la hormona del estrés), se restablece el equilibrio entre el cuerpo y la mente, promoviendo una sensación de bienestar.
- Aumentar la producción de endorfinas: Estas hormonas son responsables de la sensación de felicidad, lo que ayuda a mejorar el estado de ánimo y reducir la ansiedad o la depresión.
- Mejorar el sueño: Al relajar el cuerpo, también se facilita un descanso reparador, lo que contribuye a mejorar la calidad del sueño.
Beneficios adicionales del masaje antiestrés
Además de los objetivos principales, un masaje antiestrés ofrece una serie de beneficios adicionales que impactan de manera positiva en la salud:
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Alivio del dolor muscular y articular: Este tipo de masaje se enfoca en liberar las tensiones musculares y aliviar el dolor crónico o causado por el estrés.
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Fortalece el sistema inmunológico: Al reducir los niveles de cortisol, el cuerpo puede responder mejor a las enfermedades, fortaleciendo el sistema inmunológico.
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Estimula el sistema linfático: El masaje mejora la circulación linfática, ayudando a eliminar toxinas y promoviendo una desintoxicación natural del cuerpo.
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Mejora la postura: El alivio de la tensión muscular permite que el cuerpo recupere una postura más equilibrada y saludable.
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Favorece la claridad mental: Al reducir la sobrecarga emocional y mental, el masaje antiestrés ayuda a mejorar la concentración y el enfoque.
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Fomenta la conexión cuerpo-mente: Al prestar atención al cuerpo, se facilita un estado de mayor consciencia personal, promoviendo el bienestar integral.
En conjunto, el masaje antiestrés es una herramienta poderosa no solo para reducir la tensión física y emocional, sino también para mejorar la salud general y la calidad de vida.
